Fernando Pérez Brea es natural de Buenos Aires, de una zona verde en las afueras de la capital. Su trabajo está relacionado con los parques industriales. Es un apasionado de la casas rodantes desde pequeño y justo acaba de terminar una vuelta a España en una autocaravana Roller Team que alquiló a AC-LLAR en origen. Ahora, después de 15 días disfrutando de los rincones más singulares de la península, pone rumbo a Italia con su cuñado Alejandro Casetai, su mujer, Roxana Cibeira y la hermana de ésta, Carla Cibeira. Conocemos en esta entrevista un poco más acerca de sus motivaciones y de su experiencia sobre cuatro ruedas por España.
¿Cuándo tuvo su primera experiencia viajera en autocaravana?
Yo siempre desde pequeño quise tener una casa rodante y a mi mujer no le gustaba hasta que la cosa cambió con la pandemia. Y fue con una caravana. Desde entonces, nos encantó, y ahora ya alquilamos autocaravanas.
¿Con qué idea vienen a Europa?
La idea es recorrer España a bordo de una Roller Team de AC-LLAR con mi señora, mi cuñado y su hermana. Tenemos comprometido el viaje a España a Italia.
¿Van a visitar a familiares?
Aunque somos descendientes de españoles, no tenemos ningún familiar directo que visitar.
¿Es la primavera en el hemisferio norte un buen momento para hacer este tipo de viajes?
Sí, en esta época siempre procuramos irnos al exterior porque la temperatura y el clima nos acompaña.
¿Es la primera vez que viene a España?
Por trabajo suelo venir cuatro veces al año, pero sí que es la primera vez que lo hago en modo vacacional con mi familia y en autocaravana.
¿Qué ciudades han formado parte de la vuelta que han emprendido por España en autocaravana?
La ruta ha sido Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Sevilla. Toledo y regreso a Madrid para, desde ahí, hacer un viaje de cinco días a Italia.
¿Cómo ha sido su experiencia por las carreteras españolas?
La experiencia ha sido maravillosa, nos ha gustado que, aunque hay núcleos urbanos muy grandes existen muchas facilidades para aparcar, incluso los modelos integrales. En cuanto a las carreteras, la experiencia ha sido increíble, están nuevas, impecables, muchos kilómetros de autovías. Así la ruta se hace muy agradable.
¿Y qué es lo que más le ha gustado de esta España en modo vacacional?
La gente, sobre todo. Y la comida; se come muy bien, como en Argentina. También la cultura de reencontrarse con nuestros orígenes.
¿Cómo son las carreteras en su país?
Argentina es tan extensa, conozco toda la red viaria porque trabajé como consultor vial y hacía todos los recorridos. En general, el estado de las rutas es bueno, aunque de 40.000 kilómetros, solo 10.000 son autopistas; el resto son carreteras convencionales.
¿Y han notado más tradición de caravaning aquí que allá?
En España se nota que el caravaning está mucho más arraigado que en Argentina. Allá empezó hace muy poco. Y ahora afrontan las dificultades que entiendo ya superaron hace tiempo aquí en Europa. Me refiero a que hay ciudades que no quieren que entren las autocaravanas o zonas como la Patagonia donde es un problema sin resolver. Los municipios en Argentina están recién ahora planteándose generar un espacio para atender a los caravanistas. Y eso se agradece.
