Con motivo del Día Mundial de la Educación Ambiental, celebrado el 26 de enero, entrevistamos a Gema Alcañiz, quien atesora más de 16 años de experiencia como técnica de medio ambiente y educadora ambiental, forma parte del colectivo de educación ambiental #EA26 y, desde 2006, trabaja en el Instituto Mediterráneo para el Desarrollo Sostenible, Imedes, como responsable de la materia, diseñando, coordinando y ejecutando programas, proyectos y campañas ambientales de educación, comunicación y participación.
¿Cómo de importante es la celebración del Día Mundial de la Educación Ambiental?
Celebrar un día mundial dedicado a la educación ambiental es muy importante para todas las personas que nos dedicamos a este trabajo para tener un día en el que celebrar el trabajo que realizamos, pero también para reivindicar una mayor visibilidad y valoración de nuestra labor. Este día también nos sirve para que se hable de educación ambiental, por ejemplo, en espacios como este en el que no aparecemos habitualmente y, puesto que entendemos que la educación ambiental es fundamental para todo tipo de público, nos alegramos de que esto ocurra.
¿Qué papel juegan Gema Alcañiz e Imedes en una jornada como esta?
Aunque suena a tópico, para mí y para Imedes todos los días son el día de la educación ambiental puesto que trabajamos diariamente para crear nuevos proyectos que ayuden a mejorar la conciencia ambiental en nuestra sociedad.
¿Cómo es el día a día de un educador ambiental?
Dentro del sector de la educación ambiental hay una gran diversidad de realidades dependiendo del lugar en el que se realice, la temática, el tipo de público,... La educación ambiental se puede desarrollar en espacios naturales, en centros educativos, en empresas privadas,...o en la calle de cualquiera de nuestros pueblos y ciudades.
Las actividades pueden desarrollarse mediante charlas, juegos, talleres,...y estar dirigidas a un aula de 3 años, un grupo de formación ocupacional, una asociación empresarial o un ayuntamiento.
Por todo esto, el trabajo de las personas que se dedican a la educación ambiental es diverso y necesita una enorme dosis de capacidad de adaptación y de conocimientos, tanto teóricos sobre las materias a transmitir (cambio climático, agua, contaminación atmosférica,) como capacidades para la organización de actividades, dirección de grupos y comunicación.
¿Qué utilidad tienen las redes sociales y las plataformas digitales para reforzar esa tarea divulgativa?
Las redes sociales y las plataformas digitales son herramientas poderosas para amplificar nuestra labor educativa. Bien utilizadas, estas herramientas facilitan la difusión de información, permiten llegar a públicos a los que no llegaríamos de otra forma y la creación de comunidades comprometidas con la protección del medio ambiente.
¿Cómo percibe desde fuera a los amantes del caravaning con el medio ambiente y qué consejos les daría?
Los amantes del caravaning tienen la oportunidad de ver de cerca los problemas que pueden generar las malas prácticas en cuanto a gestión del medio ambiente y, al mismo tiempo, disfrutar de todas las maravillas que ofrece una naturaleza libre de contaminación.
Para eso les aconsejaría formarse acerca de cómo pueden disminuir su impacto sobre el medio y qué opciones tienen para realizar una gestión adecuada de residuos, usar los recursos de forma consciente y elegir los destinos que sean adecuados y estén preparados para este tipo de turismo. Actualmente hay gran cantidad de información sobre estos temas.
Y si hace falta, pueden contar con Imedes para que les asesore sobre cómo reducir la huella ecológica de sus viajes.
¿Se atrevería a hacer su tarea de concienciación a bordo de una autocaravana o cámper?
¡Por supuesto! La educación ambiental no conoce límites geográficos y realizar mi trabajo a bordo de una autocaravana me permitiría llegar a lugares a los que no llegaría de otra forma, conectar con personas que realizan este tipo de turismo y mostrar cómo se puede disfrutar de la naturaleza de manera responsable.
Sería una experiencia estupenda.
Y si tuviera que recomendar un destino ideal para valorar la buena labor de las personas con el medio ambiente, ¿cuál sería?
Recomendaría visitar parajes naturales bien conservados, pero que, al mismo, tiempo, estén adaptados para recibir este tipo de turismo.
Yo le tengo especialmente cariño al Parque Natural de la Albufera en Valencia donde se puede encontrar una gran biodiversidad de especies y ecosistemas y que cuenta con varios campings donde alojarse con caravana o autocaravana. Además, tiene una historia de conservación, gracias al esfuerzo de la ciudadanía, que merece la pena conocer.
¿Qué nota pone en términos generales la concienciación medioambiental de los valencianos?
En líneas generales, creo que hay un aumento en la conciencia medioambiental dentro de la Comunidad Valenciana. No obstante, siempre existe margen para la mejora. En la actualidad, nos encontramos ante un desafío socioambiental apremiante: el cambio climático. Ante esto, resulta necesario fortalecer la educación ambiental, asegurando que llegamos a toda la ciudadanía para explicar las causas y consecuencias de la crisis climática y, sobre todo, para sensibilizar acerca de la importancia de conseguir soluciones colectivas que incluyan a toda la sociedad.