Menos de 24 horas ha durado el intento del Gobierno de poner puertas al campo. Esto es una batala continua, la fuerza libertaria de internet intenta ser combatida todos los días por distintos flancos.
¿Quién tiene razón? ¿dónde está el límite? ¿quién ganará la contienda?
Sin ninguna duda ganará la libertad aunque a veces el precio que hay que pagar por ella esa caro. Internet es la factoriía del copia y pega. Todos los días se crean miles de páginas web, contenidos directamente copiados a golpe de clic, pero lo internautas libres, con criterio para decidir sabes distinguir la copia del original, al crativo del copión.
Esto no es algo nuevo. Se dice que en cualquier biblioteca si separamos las ideas originales de las copias podríamos agrupar éstas es no más que un par de libros.
Internet también es un gran escaparate que muestra toda nuestra vida, nuestra empresa, nuestro producto. Toda nuestra capacidad de crear, innovar, todo el talente puesto al servicio de una idea, pero también su falta cuando se copia. Y es que hay veces que hay tan poca capacidad de creación que resulta más fácil el producto, el diseño, la presentación, incluso a veces hemos visto hasta párrafos enteros copiados.
En sí mismo la copia al único que perjudica es al incapaz de crear, a hacer lo más difícil, innovar, crear algo inalcanzable para los que no tienen talento.
La libertad de creación en internet permite la libertad de copiar pero también a que la gente distinga el original de la copia.